REQUIEM PARA CUATRO MANOS


Teatro Colón de Buenos Aires

Tal i com us vaig prometre ahir, us deixo amb un conte de la mare de la Silvia, la Sra. Elena Jorge.

Quan la Silvia me’l va enviar no m’ho vaig pensar dues vegades, ho vaig tenir claríssim,  editaria el post l’endemà de la Fono que la seva filla li va dedicar.

Aquí us el deixo

REQUIEM PARA CUATRO MANOS

Frida Kroll, solterona solitaria, frisando los sesenta años, vive casi ajena al mundo que la rodea. Alta, delgada –quizá demasiado- se la ve con alguna frecuencia en la parada del bus: traje sastre invariablemente gris, como sus cabellos recogidos en un rodete bajo. Un pequeño sombrero aboinado acentúa su aire germánico. La señorita Kroll mantiene intacto el chalet heredado, reducto teutón del barrio de Belgrano, milagrosamente a salvo del avance de los edificios modernos. Su único y verdadero amigo es el Steinway de cuarta cola, obsequio de su padre cuando cumplió los quince años. Son sus bienes invalorables, la biblioteca y el archivo de partituras coleccionadas a través de toda su vida; reúne sin exagerar, la creación instrumental completa de Mozart. Para la señorita Kroll los acontecimientos del mundo exterior no son ni significativos ni insignificantes: sencillamente no existen. Solitarias veladas musicales, siempre mozartianas, son su ritual diario, a veces compartidas con su amiga Ingrid, una violinista que de vez en cuando la acompaña a tomar el té y a tocar algunos dúos de este autor. ¡Cómo no conmoverse con esta frase del libro que está leyendo de Hermann Abert: “El arte de Mozart se parece a un cristal finamente tallado, cuyo brillo con diferentes luces, cambia de color en tanto la materia permanece intacta”…¡Ah!, ella ha consagrado su vida a encandilarse con ese arte.

La sala del Teatro Colón resplandece con mil luces de infinitos reflejos, como una joya gigantesca. Elegancia, saludos amables, conversaciones triviales. Obras de Mozart por el eminente pianista vienés…, con los auspicios de la Embajada…, el patrocinio del Mozarteum… La señorita Frida ocupa su platea habitual. La joya gigantesca extingue poco a poco sus mil reflejos. Concentra sus oídos y sus ojos en el intérprete. Como nunca antes se siente envuelta, transportada. Allí está el “angelo della musica”, el cristal finamente tallado,…hasta diría que los rasgos del intérprete… Los aplausos quiebran el encantamiento; el público estalla en una ovación. No espera los habituales bis. Sale, está muy agitada. Alcanza el Foyer de entrada y allí, de pronto, sus ojos tropiezan con la pequeña puerta lateral a la escalinata. Está abierta; el pasadizo que ella conoce muy bien, conduce al escenario. Podría, tal vez hacerse firmar el programa del concierto por el pianista vienés… Penetra, deja atrás la boca de luz inicial; comienza a internarse. Todavía percibe atenuados los aplausos de la sala. Avanza por el estrecho corredor cada vez más oscuro; ya no puede resistir el impulso de continuar.  Algunos escalones que descienden, desvíos, nuevos pasadizos ahora sinuosos, apenas adivinados, otros escalones esta vez hacia arriba. Un hálito frío la estremece. Ya no percibe los sonidos lejanos de la sala; el silencio es total, grave, como la oscuridad. Extraños olores húmedos la acorralan, pero continúa. Ya no sabe cuánto ha recorrido ni cuánto tiempo ha pasado; no le importa; se siente convocada. Presiente que por fin deja el mundo atrás y que es el tiempo lo que atraviesa hacia la revelación deseada. ¡Qué opresión en el pecho y en las sienes!…Ahora sí, percibe allí delante una tenue penumbra… -¿Wolfgang?, ¿Amadeus?,  pregunta con un hilo de voz. Cercana pero casi imperceptible, oye la música… La sala oscura, vacía; en el escenario apenas el resplandor vacilante de las velas de un candelabro sobre el piano… Frida se deja tomar la mano y se sienta en el taburete a su lado…¡Oh!, es tan joven; él sonríe, le sonríe y coloca una partitura amarillenta sobre el atril. Las manos pálidas asomadas bajo los puños de encaje toman las suyas y las depositan sobre el teclado. Ambos arrancan en el allegro majestuoso de la Sonata para Cuatro Manos… Él le sonríe, le sonríe siempre, para siempre.

Elena Jorge

Marzo 2004

Ara per acabar-ho d’arrodonir amb música, com estic segur que li agradaria a ella i a tots vosaltres, us deixo amb l’Allegro de la Sonata per a 4 mans KW 448 de W.A.Mozart, en una versió molt vital a càrrec de Greg Anderson & Elizabeth Joy Roe


YouTube gentilesa de gnanderson

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Un comentari

  1. Son dos quarts d’onze del mati del dia després de Sant Esteve,o sigui dies de autentiques bacanals gastronòmiques i una mica fart de tanta festa…Es una delícia llegir aquest relat…es una delícia
    FERRAN(malalt de Bach).

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  2. Com molt bé diu l’adagi: “Qui matina fa farina”, i com que en Ferran ha matinat més que no pas jo a l’hora d’enviar un comentari per a aquest “post”, ja ha expressat exactament el mateix que jo he pensat després d’haver-lo llegit: “És una delícia llegir aquest relat!”

    Gràcies, Silvia, per voler compartir-lo amb nosaltres.

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  3. Permitidme que os cuente algo sobre mi madre… era una persona culta y refinada; fue maestra de escuela, muy querida y valorada por sus alumnos y colegas. Después de jubilarse pudo dedicarse a sus pasiones: la literatura, el teatro y la ópera. Este relato es uno de los muchos que ha dejado, ella los consideraba simples ejercicios, en mi opinión son de una sensibilidad exquisita, como lo era ella.
    Gracias Joaquim por permitirme compartirlo con tus amigos “infernemnlanders”!
    Feliz 2010!

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  4. colbran's avatar colbran

    Me ha parecido un relato a la vez sencillo y exquisito, repleto de sensibilidad. Si todos los relatos que conservas de tu madre, Silvia, son de esta calidad, en mi opinión debieras publicarlos.

    Que el 2010 te depare muchas satisfacciones!

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  5. Glòria A.'s avatar Glòria A.

    Estoy deseando leer y recrearme en esos tan lindos poemas, no dejes de hacerlo Silvia, será bonito para nosotros y también bueno para ti….
    Y de nuevo…gracias Silvia. Glòria A.

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  6. ciao il mio nome è More e non moro anque mi piace moro anque … si seguro , te cuento que visito la pagina diaria mente ya forma parte de mi ritual a ver que novedades hay ,y es realmente una joya es admirable el trabajo que haces por eso te deso un my buen fin de año aqui desde argentina un forte abracio Auguri pre tutti

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